¿Es posible?
Ser madre y preparar una oposicion
Muchas llamáis a la academia queriendo preparar una oposicion y nos decís «mi situación es complicada, tengo dos niños, estoy trabajando y tengo poco tiempo para estudiar», y si, para nosotros sois unas heroínas y la situación es complicada…. pero es la situación en la que os encontráis la gran parte de vosotras, es la realidad de estas oposiciones.
Preparar una oposición es un reto para cualquiera pero, siendo madre, el esfuerzo se duplica, triplica o multiplica por mil. Y tal como está el panorama de la conciliación, las cosas no están nada fáciles para las madres de hoy en día.
Entonces, ser madre y preparar una oposición, ¿es posible?
Es difícil y duro, no te vamos a engañar, pero se puede.
Eso sí, en tu caso, debes plantearte más cosas y meditar bien si estás en el momento y en las circunstancias de empezar a opositar. No es lo mismo hacerlo con ayuda de la familia que sin ellos, o con hijos muy pequeños o más mayores. Tampoco trabajando a jornada completa o a media jornada. Y así vamos sumando circunstancias. Por eso, desde FormArte te recomendamos sentarte a deliberar objetivamente si, en estos momentos, puedes ponerte a opositar.
Poder, puedes. Eso sin duda y, sabemos que, si te lo propones y trabajas muy duro, vas a aprobar las oposiciones. Pero también vas a tener que sacrificar otras cosas, ¿puedes/quieres hacerlo? Aquí está el quid de la cuestión para nosotros.
Plantéate las siguientes cuestiones:
¿Tienes trabajo? ¿Cuántas horas supone?
¿Podrías contar con la ayuda de tu familia (pareja, padres, suegros, etc)?
¿Tu situación económica es estable?
¿Te corre mucha prisa aprobar esa oposición o puedes tomártelo con más calma?
¿Cuántas horas diarias o semanales podrías dedicarle a las oposiciones?
¿Qué estarías sacrificando dedicándole esas horas a la oposición?
¿Estudiarías por libre o buscarías una academia?
Estas son solo algunas de las cosas que puedes cuestionarte, pero hay mil más. El objetivo de responder estas preguntas es que tú misma puedas planificar cómo lo harías para conciliarlo todo (dado que la conciliación real no existe hoy en día). Si ya tienes un trabajo a tiempo completo, las horas de estudio se van a reducir pero quizás no sientes la presión de tener que aprobar en la siguiente convocatoria sí o sí y puedes ir a tu ritmo.
Si en estos momentos no trabajas quizás te urge más aprobar, pero también dispones de más tiempo para prepararte.
Si tu pareja, padres, suegros, llámale X, pueden ayudarte quedándose con los pequeños un par de tardes a la semana, ese tiempo que te aseguras de estudio 100% concentrada. Si tus hijos no son tan pequeños, pueden comprender mejor qué es lo que estás haciendo y ayudarte en casa con pequeñas tareas.
Y así con muchas cuestiones más.
También piensa en la meta, el objetivo real de todo esto. Probablemente una de las razones de más peso para embarcarte en esta aventura es mejorar tu situación familiar. La recompensa no solo será tuya, será de todos.
Pero ojo, si las oposiciones son un sacrificio que supone dejar de disfrutar de tus hijos y vida familiar, piénsatelo dos veces.
Eso sí, a los que te digan que es una situación incompatible, oídos sordos. No es incompatible, simplemente es más jodido y necesitas mucha organización.
Queremos acabar con la siguiente reflexión:
Ten por seguro que habrá más gente que se estará preparando mejor que tú las oposiciones: dedicación exclusiva, estudiando más horas que un reloj, con más facilidad para retener los conceptos e ideas, con más convocatorias a sus espaldas, etc.
Sin embargo, si no hay nadie que tenga más motivación que tú, que luche más por esa plaza que tú, y que crea más en ti que tú, ten claro, que vas a lograrlo.
Así que ánimo porque sí, TÚ PUEDES SUPERWOMAN